Solista
Edward Ramírez ha demostrado ser un curioso e inquieto investigador del instrumento; en ese sentido ha dado continuidad a una de las técnicas más empleadas en el presente por los concertistas del cuatro, el rasga punteo.
Es en la actualidad uno de los más reconocidos exponentes y referentes del cuatro solista; en gran parte, esto se debe al trabajo y el aporte que ha venido haciendo con sus compañeros de la reconocida agrupación C4 Trío, con quienes hasta la fecha tiene en su haber seis producciones, tres nominaciones a los Grammy Latinos y un Grammy Latino por el disco De repente junto a Rafael ¨Pollo¨ Brito.
Parte de su enfoque en el cuatro ha consistido en la búsqueda de un lenguaje propio, tanto armónicamente como en su labor de compositor. Ese trabajo se ve claramente reflejado en su disco Parroquia, donde propone una serie de composiciones originales creadas especialmente para el cuatro, con mirada contemporánea.
Uno de sus grandes aportes al instrumento ha sido profundizar en la manera de interpretar el joropo del centro de Venezuela, el joropo tuyero, desde el cuatro;
adentrándose en los códigos propios de este género tradicional y tomando prestada la sonoridad del arpa tuyera (instrumento que tiene la particularidad de usar cuerdas de metal en su región aguda) al cuatro. Su disco Cuatro, maraca y buche, álbum donde aborda repertorio enteramente tuyero desde el cuatro y donde presenta al público el experimento del cuatro con cuerdas de metal, es una suerte de tesis muy personal acerca de este particular joropo.
En su enfoque hacia lo tuyero usa un cuatro acústico con cuerdas de metal (un experimento sin precedentes) y un cuatro electroacústico con el que además procesa el sonido implementando pedales, logrando así ampliar el espectro sonoro del tradicional cuatro.
El origen de C4 Trío está directamente emparentado con el Concurso Internacional La Siembra del Cuatro, ideado por el maestro Cheo Hurtado, en el cual Jorge Glem, Héctor Molina y Edward Ramírez tuvieron excelentes participaciones en las ediciones de 2004 y 2005. Y es a raíz de ello cuando, en noviembre de 2005, estos tres músicos fueron invitados, junto a un cuarto cuatrista, Rafael Martínez, a participar en un concierto organizado por la Fundación Multifonía. Allí, cada uno haría una muestra de su trabajo como solista, pero espontáneamente estos músicos decidieron hacer dúos, tríos y un cierre final a cuarteto. Este momento marcó la génesis de este ensamble que tiene como figura predominante el cuatro venezolano.
De diferentes ciudades de Venezuela, Jorge Glem de Cumaná, Héctor Molina de Mérida y Edward Ramírez de Caracas, convergieron en la capital venezolana para dar forma a una de las propuestas musicales más importantes de los últimos años. En el año 2006, la agrupación asume definitivamente el nombre de C4 Trío, gracias a la grabación de su primera producción discográfica que estuvo bajo la producción musical de Aquiles Báez y que contó con la participación de un nutrido grupo de músicos venezolanos, como Serenata Guayanesa, Rafael “Pollo” Brito, Marina Bravo, Zeneida Rodríguez, Adolfo Herrera, Roberto Koch, Edwin Arellano y el propio Aquiles Báez. Rápidamente, el disco compacto se convirtió en una referencia de la música en Venezuela y en poco tiempo pasó a ser doble Disco de Oro por el número de copias vendidas.
El origen de C4 Trío está directamente emparentado con el Concurso Internacional La Siembra del Cuatro, ideado por el maestro Cheo Hurtado, en el cual Jorge Glem, Héctor Molina y Edward Ramírez tuvieron excelentes participaciones en las ediciones de 2004 y 2005. Y es a raíz de ello cuando, en noviembre de 2005, estos tres músicos fueron invitados, junto a un cuarto cuatrista, Rafael Martínez, a participar en un concierto organizado por la Fundación Multifonía. Allí, cada uno haría una muestra de su trabajo como solista, pero espontáneamente estos músicos decidieron hacer dúos, tríos y un cierre final a cuarteto. Este momento marcó la génesis de este ensamble que tiene como figura predominante el cuatro venezolano.
De diferentes ciudades de Venezuela, Jorge Glem de Cumaná, Héctor Molina de Mérida y Edward Ramírez de Caracas, convergieron en la capital venezolana para dar forma a una de las propuestas musicales más importantes de los últimos años. En el año 2006, la agrupación asume definitivamente el nombre de C4 Trío, gracias a la grabación de su primera producción discográfica que estuvo bajo la producción musical de Aquiles Báez y que contó con la participación de un nutrido grupo de músicos venezolanos, como Serenata Guayanesa, Rafael “Pollo” Brito, Marina Bravo, Zeneida Rodríguez, Adolfo Herrera, Roberto Koch, Edwin Arellano y el propio Aquiles Báez. Rápidamente, el disco compacto se convirtió en una referencia de la música en Venezuela y en poco tiempo pasó a ser doble Disco de Oro por el número de copias vendidas,